Fallo restablece el acceso público a las ruinas y ordena la actualización de las fichas catastrales.
Que las ruinas arqueológicas de Gachantivá -un sitio que alberga tumbas indígenas y edificaciones coloniales- deben ser preservadas como patrimonio público, declaró en una sentencia el Juzgado 12 Administrativo Oral de Tunja.
En respuesta a una acción popular interpuesta, el juzgado ordenó la protección de las ruinas del municipio boyacense de Gachantivá, al reconocer su valor histórico y reafirmar el poder de la ciudadanía para defender el legado cultural del país.
La decisión responde a la acción popular interpuesta contra el municipio de Gachantivá y un particular que privatizó el predio y el acceso al sitio, con lo que restringió el derecho colectivo a su disfrute.
“La defensa del patrimonio arqueológico como bien común es fundamental para el desarrollo cultural del país, ya que cada pieza protegida contribuye a la construcción de una narrativa histórica que nos define como nación. Las ruinas de Gachantivá, como patrimonio de Boyacá, representan no solo un recurso turístico y académico, sino también una fuente de identidad que debe ser resguardada”, afirmó Elizabeth Perilla, consultora jurídica de Team Consultor.
El caso, que resalta la importancia de la acción popular como mecanismo de protección de los derechos e intereses colectivos, pone de manifiesto que estos bienes culturales no pueden ser explotados en beneficio privado.
“Por ello, este fallo no solo restablece el acceso público a las ruinas, sino que también ordena la actualización de las fichas catastrales para evitar futuras irregularidades. La acción popular, consagrada en el artículo 88 de la Constitución y regulada por la Ley 472 de 1998, sigue demostrando su valor como un recurso legal clave para que la ciudadanía participe activamente en la defensa del patrimonio público y el bienestar colectivo”, dijeron desde Team Consultor.
En este caso, la comunidad logró que el juez constitucional actuará para preservar un sitio de gran relevancia histórica y marca un hito en la defensa de los derechos colectivos y del patrimonio cultural en Colombia.
“El fallo envía un mensaje contundente: la protección del patrimonio arqueológico y cultural es una responsabilidad compartida por todos los colombianos. Las futuras generaciones merecen disfrutar de este legado y gracias a este mecanismo jurídico, cualquier ciudadano puede ser un guardián de la herencia cultural del país”, añadió Perilla.
Con esta decisión, la comunidad de Gachantivá celebra una victoria, mientras el país observa con expectativa la evolución del caso ante los recursos de apelación, que se espera sean confirmados por el alto tribunal.
“Más allá de lo local, este fallo representa para todo el país la importancia de la protección de los bienes culturales que prevalecen sobre las pretensiones privadas, reforzando el rol cívico en la protección de nuestros legados ancestrales”, indicaron en Team Consultor.
Fuente: Boyacá 7 Días.